Cada día somos vulnerables y estamos más impactados por las consecuencias del cambio climático que por consiguiente también afecta en gran medida al país y su economía, como es el caso de los sargazos, un problema mundial que ha generado un impacto significativo en el turismo y economía de varias regiones, inicialmente en zonas costeras como el caribe y el Golfo de México.  Un claro ejemplo del riesgo que representa el sargazo para la economía y turismo es el caso de Quintana Roo, México. Durante el 2019, sus actividades turísticas experimentaron una reducción entre un 2.2% y un 5% debido a la llegada del sargazo.  El impacto al turismo se debe a los males olores y apariencia que genera la acumulación de sargazo, siendo poco atractivo para los turistas como locales de la zona. Dicha acumulación además genera bloqueos e impedimentos para actividades recreativas como es la natación, buceo y snorkelling. Estos factores, por ende, impactan a nivel económico, reduciendo los ingresos que generan dichas visitas y actividades en el sector turístico. Además, la inversión en limpieza implica un costo significativo y constante, ya que es necesario mantener la zona limpia y atractiva de forma recurrente. Adicionalmente, la pesca y los negocios locales