A pocos días de cerrar el año, aprovecho para reflexionar sobre las tendencias en sectores clave con impacto económico global, como es el caso del turismo. En este artículo, te invito a analizar los aspectos que perdurarán y las tendencias que definirán el turismo en 2025. En Europa, según datos proporcionados por Zurab Pololikashvili, Secretario General de la ONU Turismo, regiones como Europa, África y el Medio Oriente experimentaron un fuerte crecimiento, alcanzando cifras significativas tras la pandemia. Esta tendencia seguirá, y en América Latina y el Caribe, aunque a un ritmo más lento, también se registra una recuperación. En el caso del Caribe, se prevé un aumento en el crecimiento debido a la mayor demanda de cruceros. De hecho, como cita la ONU, el 2024 fue un año positivo para la industria turística, con un total de 1.100 millones de turistas viajando hacia destinos internacionales, lo que representa una recuperación del 98% respecto a los niveles previos a la pandemia. Estos datos son cruciales para analizar las tendencias, pues como he señalado en otros artículos, los hábitos de los viajeros y las decisiones de los consumidores se ajustan a factores emergentes. Hace unos meses hablábamos del turismo sostenible, y vimos cómo

Imagínate cerrar los ojos y al abrirlos te encuentras planeando tu próxima aventura. No es un deseo pasajero, sino un reflejo de un estilo de vida que está tomando fuerza entre las generaciones más jóvenes. Hoy, la Generación Z y Millennials están redefiniendo lo que significa viajar, infundiendo sus valores, preferencias y la tecnología en el corazón de sus experiencias de viaje. Este artículo ofrece una mirada detallada a esos hábitos emergentes partiendo de los comportamientos y preferencias de viaje de estas generaciones.  Una de las características más notables de la generación Z y Millennials es su enfoque en viajar con frecuencia, priorizando las experiencias y aventuras sobre la acumulación de bienes materiales. Esta inclinación refleja un deseo más amplio de vivir de manera plena y coleccionar momentos en lugar de objetos.  Sostenibilidad: un factor clave La sostenibilidad (al igual que en otros sectores) es un elemento crítico en las decisiones de la Generación Z y los Millennials. Estas generaciones prefieren marcas y empresas que demuestran un compromiso auténtico con la sostenibilidad y la responsabilidad social.  Según un artículo en Conciencia Eco, la Generación Z ha mostrado un fuerte compromiso con el medio ambiente y el cambio social, influenciando incluso las decisiones de consumo de

En la encrucijada de la innovación culinaria y las cambiantes preferencias de los consumidores, la industria gastronómica se encuentra inmersa en una transformación sin precedentes. En este artículo, me complace abordar la creciente demanda de opciones veganas, un fenómeno que va más allá de ser una tendencia pasajera y se consolida como un elemento esencial para el futuro del sector. Según un informe de EMR Informes de Expertos, el sector de alimentos veganos registró un valor significativo, superando los 24,59 mil millones de dólares en 2022. Las proyecciones indican un crecimiento constante, con una estimación de un CAGR del 10,1% entre 2023 y 2028. Se anticipa que para 2028 este mercado habrá superado los 43,8 mil millones de dólares, evidenciando un impulso sostenido en la preferencia por opciones de este tipo de alimento. De igual forma, datos de Research and Markets confirman esta tendencia, revelando que el mercado de alimentos veganos alcanzó un valor de más de 37,93 mil millones de dólares en 2022, proyectando un crecimiento sólido con la expectativa de llegar a más de 71,26 mil millones de dólares para el año 2030. Dicho esto, el crecimiento de la cocina vegana en la industria gastronómica se ve impulsado por una serie

La industria de la hospitalidad es una de las más grandes y prósperas del mundo, generando unos 7.7 billones de dólares en ingresos a nivel mundial en 2022. Sin embargo, también es una de las más contaminantes. Un estudio publicado en Nature Climate Change estima que  la industria de la hospitalidad es responsable del 8% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, mientras que, según datos de la  Organización Mundial del Turismo (OMT), se prevé que las emisiones de CO2 correspondientes al turismo aumenten al menos un 25% para 2030.  Dado el desafío que representa el cambio climático y la responsabilidad que recae en las corporaciones y marcas de renombre, es un placer para mí abordar en este artículo las acciones que están tomando las grandes hoteleras para reducir su huella ambiental. Una de las principales fuentes de contaminación de la industria de la hospitalidad es el desperdicio. Los hoteles, restaurantes y otros negocios turísticos generan grandes cantidades de residuos, incluyendo papel, plástico, vidrio y metal. Este desperdicio puede tener un impacto negativo en el medio ambiente, contribuyendo al cambio climático, la contaminación del aire y el agua, y la pérdida de biodiversidad. En este sentido, en los últimos años la