Por qué Japón y Colombia Deberían Estar en la Lista de Todo Amante de la Comida 2024
Los destinos turísticos no solo ofrecen entretenimiento y una inmersión en diferentes culturas, sino que también representan una oportunidad para explorar y disfrutar de la gastronomía local. Como afirma Confucio, «saber comer es saber vivir» y en estos viajes no se deja de aprender… ¡Ni de comer!
En esta búsqueda de experiencias culinarias únicas, Japón se erige como el IVY League de la gastronomía mundial.
En el escenario gastronómico internacional, Japón ocupa un lugar destacado, atrayendo a viajeros y amantes de la comida de todo el mundo. Reconocido en prestigiosas revistas digitales como Travel + Leisure y National Geographic, este país destaca por su cocina tradicional, el washoku, que no solo se distingue por su exquisito sabor, sino también por su enfoque en la sostenibilidad y el respeto por la naturaleza. La inclusión del washoku como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO subraya su importancia y valor cultural.
Además de su rica tradición culinaria, la cultura japonesa es conocida por el matcha, una bebida de té verde que ha ganado popularidad en los últimos años y cuya demanda continúa en aumento. Aunque su origen se atribuye a China, Japón ha sabido adoptar y elevar esta bebida a un símbolo de su identidad gastronómica.
Colombia como la nueva apuesta, además de su café…
Por otro lado, tenemos a Colombia que emerge como una nueva apuesta en el mapa gastronómico mundial. Aunque su reputación turística ha crecido en los últimos años debido a su atractivo económico, su cocina también ha captado la atención de los viajeros. La diversidad de influencias culturales en Colombia, desde África y Arabia hasta el Caribe y España, se refleja en la complejidad y la riqueza de sus platos. Además, la fertilidad de su tierra y sus diversas condiciones climáticas favorecen la producción de una amplia variedad de productos frescos y de alta calidad.
En resumen, tanto Japón como Colombia ofrecen experiencias culinarias únicas que combinan tradición, innovación y una rica diversidad cultural. Estos destinos no solo satisfacen los paladares más exigentes, sino que también ofrecen una ventana a las historias, los sabores y las tradiciones que dan forma a su identidad gastronómica.