Casos de Éxito: Restaurantes Propulsores en Destinos Turísticos

Movilizar a grandes audiencias y atraer turismo es un desafío, especialmente para quienes buscan posicionar un país o región como destino atractivo. Sin embargo, hoy en día, la influencia de las marcas y figuras en redes sociales ha impulsado tendencias capaces de atraer a turistas ávidos de experiencias únicas, desde platos icónicos hasta conceptos de alta cocina.

Un claro ejemplo de este fenómeno es Crumbl Cookies, una franquicia que ha aprovechado el poder viral de TikTok para convertirse en una franquicia codiciada. Estas galletas, consideradas como auténticos obsequios, no solo se han convertido en un referente viral, sino también en una franquicia de alta demanda y valor. Asimismo, muchos restaurantes y productos exclusivos de ciertos países crean un atractivo aún mayor, motivando a los turistas a desplazarse específicamente para experimentar algo auténtico. Este efecto se observa entre los millennials, donde, según una encuesta de App Marketplace News, el 53% de los encuestados ha visitado o pedido en un restaurante que descubrió en TikTok.

Algunos destinos turísticos también se distinguen por sus especialidades gastronómicas, las cuales, además de generar identidad cultural, pueden movilizar turismo de forma masiva. México con sus tacos, Japón con el sushi y el ramen, Italia con el gelato, la pizza y las pastas, y Perú con el ceviche representan platos que trascienden fronteras, y varios restaurantes en estos países han impulsado aún más el interés por visitar dichos destinos. En Perú, por ejemplo, el 82 % de los turistas considera el país un destino gastronómico, y esto se ve respaldado por la popularidad de sus restaurantes. Maido, en Lima, es reconocido como uno de los mejores de Latinoamérica por Latin America’s 50 Best Restaurants. Este restaurante fusiona magistralmente técnicas japonesas con ingredientes locales peruanos, creando una experiencia gastronómica única y de alta cocina nikkei, que además de atraer a locales, motiva a turistas a sumergirse en la innovadora propuesta de platos como el Nigiri a lo Pobre, con carne Angus y huevo de codorniz relleno de ponzu.

Estos casos ilustran cómo la sinergia entre alta cocina y estrategias de negocio bien ejecutadas puede transformar una pasión gastronómica en un motor de turismo rentable, demostrando que con visión y adaptabilidad, el restaurante correcto puede convertirse en una razón para viajar y descubrir nuevas culturas.